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A EQUIPA
CONTACTO
Séptimo de los nueve hijos del matrimonio formado por Benito Pabón Galindo y Teresa Suárez de Urbina y Cañaveral. Nació en Sevilla, en el seno de una familia hidalga y tradicionalista, por línea paterna y carlista por línea materna (su tío José Suárez de Urbina fue cronista del pretendiente Carlos VII). Entre sus hermanos destacan las trayectorias de José Manuel (1892-1978) que fue catedrático de Lengua y Literatura Latina, y Benito (1895-1958), abogado, diputado y dirigente anarquista de la CNT durante la Guerra Civil.
Estudió el bachillerato en el Colegio de San Luis Gonzaga del Puerto de Santa María (Cádiz) perteneciente a los jesuitas. El centro llegaría a ser llamado «Colegio de los Poetas» por el plantel de escritores que salieron de sus aulas (Juan Ramón Jiménez o Rafael Alberti, entre otros). Licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad de Sevilla (1921), se doctoró en Madrid con la con la tesis, dirigida por Adolfo Bonilla San Martín, Positivismo y propiedad (1924). Ese mismo año, inició su carrera docente como Auxiliar de Literatura Española y Latina (Sección de Historia) de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Zaragoza (1924-1929). Recordado por sus alumnos como un «descubrimiento» en las clases que impartía sobre los escritores españoles finiseculares («Pabón, tenía gracia y agilidad, hablaba bien. Con frecuencia leía, de modo perfecto, trozos de los autores que explicaba», escribió José María Castro Calvo, Mi gente y mi tiempo, Zaragoza, 1968, p. 314), a lo largo de toda su carrera, la sensibilidad literaria y la consideración de la literatura como una fuente histórica de primer orden será una de las señas de distinción de su personalidad de historiador.
Durante su estancia en la capital aragonesa estableció amistosas relaciones con el general Francisco Franco Bahamonde, director de la Academia General de Zaragoza (fundada en octubre de 1928) y frecuentó el círculo creado alrededor del Instituto Amado y la revista Alfa-Beta, regentados por el militar coruñés Santiago Amado Loriga y de cuyo profesorado formaban parte dos personajes que alcanzarían renombre en la política de la dictadura: Ramón Serrano Suñer –futuro cuñado de Franco– y José María Escrivá de Balaguer, fundador de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz y del Opus Dei (1928).
